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La nueva estética se basa en la naturalidad en la cirugía plástica y estética. Labios excesivos, pómulos hinchados, pieles estiradas… los cánones de belleza varían y evolucionan a lo largo de los años. Un desafío que la cirugía plástica ya hace posible.
Hay un tipo de imagen que se ha convertido en referente de pacientes, cirujanos plásticos y médicos estéticos: un rostro con un aspecto saludable, muy natural y que respete los gestos normales, evitando los rellenos sin criterio y que elimina las manchas propias del envejecimiento, pero sin tocar las pecas naturales.
La naturalidad en la cirugía plástica y estética no es una hipótesis sino una realidad. Se trata de tratar con eficacia los signos del envejecimiento dotando al rostro de juventud, luminosidad y tersura.
Naturalidad en la cirugía plástica y estétical: Rejuvenecer sin parecer otra persona
Los actuales cánones de belleza nos impulsan a rejuvenecer sin cambiar, mejorar el aspecto de la cara sin transformarse en otra persona, no perder la naturalidad. Estos son algunas de las demandas más comunes actualmente, en los pacientes que quieren mejorar su aspecto y lo que aconsejan los mejores especialistas en cirugía plástica.
Los resultados naturales se consiguen a través de intervenciones más complejas, más prolongadas y con un riesgo mínimo. Las técnicas quirúrgicas son cada vez más sofisticadas y exigen un profundo conocimiento, atención al detalle y profesionalidad por parte del cirujano plástico y de su equipo.
Lifting facial en la actualidad
El lifting facial actual no tiene nada que ver con el que se practicaba hace años, con el que básicamente, se realizaba un estiramiento de la piel del rostro, cuyo resultado, en muchas ocasiones, eran caras que parecían sufrir constantemente el azote del viento. No se atendían aspectos que en la actualidad se tienen en cuenta especialmente.
No buscamos un cambio radical, ni alterar la expresión del rostro, sino de restarle años y conseguir que el paciente se sienta mejor consigo mismo.
La mayoría de los liftings se combinan con técnicas de rejuvenecimiento cutáneo que eliminan las capas dañadas de la piel.
Hoy por hoy, el concepto ha cambiado y la cirugía también. Un lifting facial es mucho más que una intervención, es un concepto. Además de la modificación de estructuras para conseguir un resultado más natural y duradero, se compensa la pérdida de grasa con rellenos de grasa autóloga para recuperar y rejuvenecer los volúmenes y se mejora la calidad de la piel, consiguiendo que se vea uniforme, sin manchas, luminosa… y sobre todo, que apruebe el examen de la naturalidad.
Elevar unas cejas caídas, definir la línea mandibular, trabajar el cuello, subir las mejillas, abrir la mirada… El lifting facial consiste en recomponer la caída de los tejidos de la cara y reposicionarlos con técnicas de cirugía que han avanzado de forma notable y permiten conseguir unos resultados muy naturales.
Remodelación de labios con ácido hialurónico
Muchas veces son los labios los que se llevan la parte más dramática de los resultados de la cirugía plástica y estética.
Muchos de los rellenos de labios hechos hasta ahora engrosaban el labio y lo deformaban de manera que el efecto conseguido era justo el contrario que se buscaba: artifical y envejecedor.
Además han creado muchos problemas de salud entre las pacientes a las que se les inyectó polímeros (silicona). Este componente migra por la mucosa y pueden agruparse en forma de granulomas, unos bultitos muy antiestéticos, molestos y difíciles de quitar.
Las técnicas de tratamiento de los labios han evolucionado, y mucho. Ya no se limitan al relleno, sino que estudian la anatomía de cada paciente y restauran el labio existente para potenciar su belleza.
Antes de inyectar un relleno en los labios siempre hay que hacer un análisis exhaustivo de la zona para descubrir exactamente qué debemos trabajar. En la mayoría de los pacientes, resulta más necesaria y conveniente una remodelación que un aumento del labio.
El ácido hialurónico se inyecta en varios puntos del labio para conseguir una remodelación y un sutil aumento de la zona más carnosa de la boca y definir el contorno de los labios, esa línea clarita y firme que eleva un poco la mucosa y la separa de la piel. Tiene un efecto rejuvenecedor y natural y se puede combinar con algún componente que alise las arruguitas de la mucosa, un detalle mínimo pero muy valioso, capaz de borrar unos cuantos años de un pinchazo.
Los labios carnosos y bien proporcionados son síntoma de belleza y juventud, de ahí que cuando la naturaleza no nos ha dotado de esta característica necesitamos soluciones en el mundo de la cirugía estética, que cada día se encarga de ayudarte a conseguir labios tan deseados con resultados verdaderamente espectaculares.
